COMPOSICIÓN PREBIÓTICA DE ACEITES ESENCIALES Y L-CARNITINA

Descripción

Actualmente, la cardiopatía isquémica (CI) y la diabetes mellitus tipo 2 (DMT2) son dos patologías problemáticas de salud en todo el mundo. Estas enfermedades se encuentran íntimamente relacionadas debido a la asociación entre el estado metabólico y el riesgo cardiovascular. Estudios previos en ambas enfermedades sugieren la relación entre la microbiota intestinal y estas patologías. El consumo de la dieta mediterránea presenta propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Además, se ha relacionado con un incremento de bacterias beneficiosas, como por ejemplo aquellas relacionadas con la producción de ácidos grasos de cadena corta de gran importancia para la salud. Sin embargo, se ha observado que estos efectos beneficiosos son limitados, por lo que es necesario el diseño de nuevas estrategias nutricionales, como el desarrollo de nutracéuticos. Por este motivo, un grupo de investigación ha desarrollado una composición de aceites esenciales de plantas propias de la dieta mediterránea junto a L-carnitina. Uno de los ejemplos del efecto de estas fórmulas nutracéuticas sobre la microbiota, es la disminución de sustancias proaterogénicas de origen bacteriano, como el TMAO, que se asocian con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares. Estas fórmulas a partir de aceites esenciales presentan, además de los efectos beneficiosos propios de la dieta mediterránea, los específicos sobre enfermedades cardiometabólicas como la CI y DMT2.

Ventajas competitivas

• Permite una mejora prebiótica sobre la microbiota intestinal en relación con la CI y la DMT2. • Tiene efectos beneficiosos sobre la CI y la DMT2 debido a su actividad antiinflamatoria y antioxidante.

Usos y aplicaciones

La aplicación de la invención es en el campo médico, en concreto en las enfermedades cardiometabólicas. En la actualidad, cada vez está cobrando más importancia la predicción de la progresión de estas enfermedades y su relación con la microbiota intestinal. La presente invención resuelve este problema, pues permite el desarrollo de nuevas fórmulas nutracéuticas que disminuyen las sustancias proaterogénicas de origen bacteriano, que se asocian con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.